y ya no es sólo que Paco aquel tipo que compraba tangas en Glam y que curraba de gogó en Kapital y que se rasuraba todo el cuerpo y que llevaba una agenda con todos los polvos que había echado en su vida poniéndoles nota esté ahora de director creativo en Walter Thompson y haya pillado premio en Cannes y pueda darme su tarjeta color sepia de estupendo diseño (en Cannes, en Cannes, joder) sino que encima Roberto, si, Roberto, cuyo mayor triunfo existencial hasta ahora había sido ser popular por imitar a Chiquito de la Calzada allá por mediados de los noventa ha ganado no sé qué concurso y ha podido elegir prácticas y ahora está en un equipo creativo en Vitrubio y seguro que va con esos pantalones suyos de payaso de anuncio de detergente al que se le van los colores y llora desconsolado, y a mi nadie me levanta una estatua ni le ponen mi nombre a un día de la semana ni me dan una pensión vitalicia sólo por existir y ser tan maravilloso y tan increíble y tan capaz y oh well i get what i deserve, definitivamente debí equivocarme de vocación así que mejor me voy a ver la teuve un rato y a pensar que la vida al fin y al cabo no puede reducirse a conseguir ser un publicista snob teintañero enganchado a la coca y untado de pasta y rodeado de malas mujeres, un bourgeois boheme de esos, porque seguramente la gorra del Burger King no me va sentar tan mal.
Posted by P. at 2 de Septiembre 2003 a las 05:07 PM