Voluntary Human Extinction Movement.

        Damas y caballeros, no se lo piensen: les invito a unirse al Movimiento por la Extinción Voluntaria de la Humanidad (dirección robada vilmente a Die Frau Maschine, fuente inagotable de kitsch y caspa ochentera absolutamente recomendable)
        Para demostrar mi apoyo a esta organización y mi completa identificación ideológica he empezado a ahorrar para hacerme la vasectomía (la castración química no me convence, que uno últimamente no moje no significa que quiera dejar de hacerlo de por vida). Vistos los precios de la operación, estoy visitando varias páginas del tipo "Hágalo usted mismo (Cirujanomanía)". Todavía no sé si recurrir a lo del mordisco (creo que no llego hasta los conductos deferentes a menos que me quite unas costillas) o a lo del martillazo. Quizá sea mejor seguir bebiendo y fumando hasta quedarme esteril, porque me da un no sé qué que qué sé yo que yo qué sé andarme toqueteando con un cutter roñoso en esa zona.
        Por fin el futuro se presenta esperazador.