7 de Agosto 2003

Entrevista III.

        Hoy el Señor Adrián (a quien vemos aquí en “Hamlet”) ha tenido la desfachatez de sacarme del congelador, donde disfrutaba de un satisfactorio veraneo, para que responda a su malsana curiosidad en esta entrevista. Por supuesto, me he visto en la obligación de devolverle la jugarreta.

        Sr. Adrián - Sin rodeos. ¿De qué equipo es usted?
        P. - ¿De cual voy a ser? del Equipo A. He heredado el atractivo de Phoenix, la gracia de Murdock, el savoir faire de Hannibal y la cresta de M.A.

        Sr A.- Se rumorea que sus visitas a Málaga no se deben tanto al placer estival como a la intención de bajarse al moro y que la señorita Caína ejerza de camello. ¿Cuáles son sus declaraciones al respecto?
        P. – No tengo el discutible placer de conocer a la tal Srta Caína, (aunque ella insita en acusarme de la muerte de su conejo y de beberme su café), nunca he estado en Málaga (fue mi hermano gemelo malvado) y no es cierto que esté entrenando para esconderme quince huevos de hachis en el trasero.

        Sr A. - ¿Cuál es el motivo de que oculte su rostro en las impresiones fotográficas? ¿Teme acaso que le roben el alma?
        P. - No oculto mi rostro. En realidad tengo una enorme P. negra en lugar de cabeza, lo cual dificulta enormemente el comprar sobreros y sonreír.

        Sr A.- Si Mickey era un ratón y Pluto un perro… ¿Qué era Goofy?
        P. – Un ornitorrinco desarrapado y torpe con algún cromosoma de menos, una estúpida risa de “jujujui” y claramente el único personaje hetero de Disney.

        Sr A. - ¿Piensa en sus fans a la hora de salir a la calle y darse cuenta de que algún lector podría acosarle?
        P. - De crío me acostumbré a salir con una bolsa en la cabeza para que los otros niños no me tirasen piedras. Ahora no soy fácilmente identificable porque siempre llevo puestas unas gafas y nariz postizas. Como socio fundador, presidente, secretario y miembro único de mi club de fans, me acoso con frecuencia, aunque algunos se empeñan en tildarlo de “onanismo”.

        Sr A.- ¿Qué opina de la inclusión de Grecia en la zona euro?
        P. - Opino de que si.

        Sr A. - Hemos dejado para el final la última pregunta, por aquello de que si no, no sería la última: ¿Le importa si le llamamos de usted?
        P. - Last and yes least, si se le ocurre tratarme de “tu” en algún momento, le partiré los morros, quemaré su casa y sembraré sus campos con sal.

Posted by P. at 7 de Agosto 2003 a las 07:51 PM
Comments
Post a comment
















Atención: Introduce el código de seguridad para poder comentar.