11 de Febrero 2003

Entrevistado por una Ameba.

        Nueva colaboración entre blogs. Esta vez es el Señor Darío quien me envía un cuestionario con preguntas algo más íntimas que en la ocasión anterior. Espero que sepan apreciar el gesto de abrir mi corazoncito de una manera tan directa. Aquí tienen.

        Señor Darío - ¿Por qué esa obcecación en hablar a todo el mundo de usted y esperar el mismo trato?
        P.- El tuteo resulta incómodamente familiar y sólo me lo permito con personas con las que he tenido trato carnal (y no me refiero a intercambiar chuletas de cordero). No hay porque perder las formas ni la educación, a veces es lo único que se tiene.

        Sr. D.- Negro, siempre de negro...
        P.- Respuesta sencilla: el negro adelgaza, no se ven las manchas con tanta facilidad, combina con todo y va a juego con mis pulmones.

        Sr. D.- Recomiéndenos tabaco de liar y papel para aquellos que queremos adentrarnos en el maravilloso mundo del cancer de laginge.
        P.- Recomendaría esnifar rapé o mascar tabaco. Ciñéndonos al tabaco de liar, Amsterdamer, sin duda. Dada la escasez de tan preciado tesoro, pueden conformarse con el Samson Ultra Milde Shag. En papeles, el OCB nº 4 (“si vous les aimez bien roulées..”) o el Smoking Blue.

        Sr. D.- ¿Cuál es la figura más sorprendente que ha descubierto en el gotelé de su zulo?
        P.- Ayer mismo, a eso de las cuatro de la madrugada, descubrí una reproducción exacta de un cuadro de Schiele, pero mi figura favorita es un conjunto de manchas de gotelé que se asimilan sorprendentemente a un grupo de manchas de gotelé.

        Sr. D.- ¿A qué se dedica cuando vuelve a casa, después de dejarnos en la puerta del bar al principio de la noche?
        P. - Normalmente les miento y me voy con mis verdaderos amigos. En otras ocasiones vuelvo a mi buhardilla a ponerme de coca, sacrificar pequeños mamíferos y bailar pasodobles vestido sólo con unos calcetines.

        Sr. D. - La carrera: un hobbie, un quiste, una necesidad...
        P. - Una putada cuando aparece en mis medias favoritas.

        Sr. D.- ¿Ha sido incapaz de terminar de leer algun libro?
        P.- Todavía me estoy recuperando de haber ojeado las primeras páginas de “Cartas a un Joven Poeta “ de Rilke. Con el listín telefónico aun no me he rendido.

        Sr. D. - ¿A qué parte de su cuerpo tiene o trata con mas cariño?
        P.- Mi apófisis xifoides. Le saco brillo, lo pulo, lo mantengo en forma y le canto una nana por las noches (ya saben, la de “duermete apófisis xifoides, duermete ya…”). Si no saben donde está, pregúntenle a Señor Gonzalo, que es el experto en anatomía. Les adelanto que no es en la entrepierna.

        Sr. D. - ¿Qué le parecen esos rumores que relacionan a su amigo el Sr. Joshua y Marujita Diaz?
        P.- El Sr. Jose hace bien no revelando nada de su vida privada, pero si queda entre usted y yo, le diré que creo que está muy enamorado y que no se acuesta con ella por el dinero.

        Sr. D.- ¿Nunca ha pensado en dejarse un bigote para mesarselo? Le daria un toque distinguido.
        P.- A mi la clase, la distinción, el garbo, el estilo y el savoir faire se me notan sin necesidad de bigote.

        Sr. D. - ¿Cuántos cigarros se ha fumado durante el transcurso de esta entrevista?
        P.- Contaría las colillas del cenicero, pero cuando superan el número de dedos que tengo en las manos (diez, creo) me pierdo. A veces puedo contar hasta 20, pero me haría falta descalzarme y no me apetece coger frío en los pies.

        Damas, caballeros, sientanse libres de mandarme las preguntas que les venga en gana. Estoy pensando en abrir un ciberconsultorio sentimental.

Posted by P. at 11 de Febrero 2003 a las 05:03 PM
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